“El Gobierno de La Rioja tiene hoja de ruta: equilibrio, austeridad y eficiencia, manteniendo siempre la calidad de nuestros servicios”
- Es usted una de las incorporaciones del nuevo Gobierno de Pedro Sanz y en un área convulsa como es Hacienda y Administración Pública. ¿Cómo valora su entrada en el Ejecutivo regional?
Desde el principio hemos empezado con muchísimo ritmo de trabajo porque había que hacer un reorganización, un reestructura en el Gobierno regional que permitiese dar cumplimiento a ese principio de austeridad que han marcado estas elecciones y el programa electoral del Partido Popular. De manera que, desde el inicio, esa reorganización de la estructura del Gobierno de La Rioja, ese paso de diez a siete consejerías, ha supuesto un volumen importante de trabajo para adaptar a la nueva estructura todos los departamentos del Gobierno regional.
Por otra parte, septiembre es un mes clave para todo el trabajo de elaboración de los presupuestos del año siguiente, de manera que es ritmo de trabajo ha sido vertiginoso.
- Hacía referencia al tema de los presupuestos y estos días se habla de la reforma de la Constitución y de la ley paralela que va a obligar a que, a partir de 2020, el déficit no pase del 0,4%. ¿Es posible conseguir esto en La Rioja?
Ha llegado un momento en que esta medida es imprescindible. Aquí en España hemos desaprovechado más de cuatro años en intentar adoptar medidas que permitieran dotarnos de instrumentos y herramientas para conseguir esa estabilidad presupuestaria y ahora no queda más remedio, de cara a los mercados, a una imagen pública, que haya esa propuesta, que se hizo por el PP y fue rechaza en su momento. Ahora se han dado cuenta de que es algo indispensable que nuestro ordenamiento jurídico contemple una ley de techo presupuestario, una ley de estabilidad. Que se introduzca en la Constitución va a servir para que los mercados internacionales no provoquen estas tensiones en el precio del dinero, porque el que la prima de riesgo haya llegado a estos límites inasumibles obliga a tomar este tipo de medidas.
La situación de La Rioja es mucho mejor que la de cualquier otra Comunidad autónoma en territorio nacional y eso provoca la necesidad de que se atiendan las necesidades concretas de cada Comunidad autónoma. Es necesario dar esa imagen de que las administraciones no derrochan. Es importante que las entidades bancarias, los ciudadanos, los mercados internaciones y la sociedad en general sepan que las administraciones públicas, como está haciendo la riojana, van a gastar en función de sus ingresos, que haya ese equilibrio y que tengan la absoluta tranquilidad que lo que pidan se va a pagar.
En España, además, ha habido una mala gestión de las previsiones de entregas a cuenta de las comunidades autónomas, esas entregas a cuenta suponen una parte muy importante de los presupuestos, y estos errores que ha cometido el Gobierno socialista en los últimos años nos van a obligar a devolver un importe en torno a los 250 millones de euros, que es, para los riojanos, una cantidad próxima al 20% del presupuesto autonómico, un daño importante en la Tesorería de la Comunidad autónoma.
Si ahora el Gobierno de España nos obliga a devolver cerca del 20% de nuestro presupuesto, habrá que adaptar las políticas a la situación de nuestra región. De ahí esos 'artes malabares' para buscar la eficiencia en la Administración, en hacer lo mismo con menos gasto, en buscar la simplificación de costes, en ver cómo las nuevas tecnologías nos pueden ayudar a ahorrar… Esa reorganización que hemos hecho es para adaptar la Administración a la situación real.
El reto es conseguir ese equilibrio en nuestros presupuestos, seguir haciendo más con menos presupuesto y manteniendo nuestras líneas prioritarias que son: mantener los servicios básicos de educación, servicios sociales y sanidad; seguir impulsando las políticas de I+D+I (porque solamente a través de la innovación vamos a conseguir un tejido competitivo que cree empleo); y seguir impulsando políticas de internacionalización.
- ¿Qué es lo más urgente actualmente en La Rioja?
Lo más urgente es poder reorganizar todas nuestras políticas para reajustarlas a un presupuesto equilibrado. Ajustar las actuaciones que estamos realizando a los niveles presupuestarios que nosotros podemos desarrollar. No podemos llevar a cabo políticas que cuesten más de lo que se ingresa. Nuestro nivel de ejecución tiene que venir en una relación de equilibrio con nuestro nivel de ingresos y el objetivo es ir reduciendo la deuda para que en los próximos años podamos estar en unos niveles de deuda razonables que nos saquen de esta situación económica en la que la prima de riesgo ha llevado a que los intereses que las entidades bancarias piden a los empresarios sean cinco veces superiores a los que están pidiendo, por ejemplo, en Alemania.
Lo que tenemos que hacer es generar confianza, no sólo en el ámbito nacional, sino en el internacional; ser respetuosos y responsables con la política presupuestaria; diseñar las políticas ajustadas con nuestro nivel de ingresos; y conseguir que dentro de unos años la calidad de la Tesorería riojana siga estando en una posición mejor que las de otras Comunidades autónomas y conseguir que esos niveles de deuda sean cómodos y no atosiguen a la Administración.
- Ha comentado usted una serie de 'debilidades' o de puntos que hay que mejorar, pero la posición privilegiada de La Rioja se debe a que disponemos de fortalezas con respecto a otras comunidades autónomas.
Sí, tenemos grandes fortalezas y oportunidades. La Rioja las ventajas que tiene son, por un lado, la trayectoria que ha tenido; por otro, las oportunidades que se generan en esta Comunidad autónoma. En La Rioja los distintos sectores están muy diversificados. La construcción no ha tenido el peso que tenía en otras comunidades autónomas. La industria tiene un peso importante con respecto al PIB. La agricultura tiene unos niveles superiores. Esto nos ha permitido articular un sistema con los distintos desarrollos en los sectores que ha conseguido una consolidación superior en nuestra Comunidad autónoma del nivel de riqueza. Eso hay que mantenerlo, pero además hay que ayudar a que aspectos como la innovación se vayan introduciendo en todos los tejidos.
La Rioja ha sabido bandear mejor la crisis económica por cómo se ha invertido en I+D+I, por cómo las empresas han trabajado en tener productos muy especializados y moverse en todos los mercados.
La calidad de vida que hay en nuestra Comunidad hace que seamos una región deseada, no sólo por nuestros vecinos sino a nivel internacional.
- ¿Qué va a aportar Concepción Arruga a esta gestión, cuáles serán las características de su gestión?
Aportaré todo lo positivo que sea capaz de dar. Estamos dedicando importantes esfuerzos para optimizar todos los recursos. La eficiencia, la optimización están siendo mensajes sistemáticos en el análisis de cada uno de los ámbitos. Estamos estudiando absolutamente todo para aplicar ese 'más por menos' en La Rioja.
Tenemos un reto importante: queremos seguir dando los servicios con la misma calidad pero tenemos que buscar cómo ahorrar determinados gastos. Para eso un ámbito importante va a ser la Central de Compras: para seguir manteniendo los mismos servicios vamos a realizar un importante esfuerzo para realizar esa compra centralizada que sería una adaptación de cómo conseguir mejores precios.
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“El Gobierno de La Rioja tiene hoja de ruta: equilibrio, austeridad y eficiencia, manteniendo siempre la calidad de nuestros servicios”.
